11 de diciembre de 2008

Declaración de los Reveses Humanos

Todos los hombres mueren iguales, convertidos en polvo, aunque hayan nacido diferentes.

Todos los hombres son injustamente tratados en su vida, aunque algunos además son maltratados.

Todos los hombres se mueven libremente en la jaula en la que viven presos, entre muros y fronteras.

Todos los hombres creen en aquello en lo que les enseñan a creer de pequeños.

Todos los hombres se distinguen por el color de su piel porque ella decidirá el color de su dinero.

Todos los hombres son educados en la medida en que se necesita que sepan para que puedan ser esclavos.

Todos los hombres creen que son hombres y olvidan que las mujeres son seres humanos.

Todos los hombres tiene asegurados sus reveses aunque no luchen por ellos.